La búsqueda de la rentabilidad en activos financieros.

 

El mercado siempre tiende a buscar su punto de equilibrio, por eso es importante no dejarse llevar por las sensaciones momentáneas de un mercado alcista. El año 2021 presentó un escenario donde todo subía, muchos inversores se dejaron llevaron por este sentimiento para colocar capital en proyectos que han acabado teniendo rentabilidades negativas o incluso desapareciendo, es esencial invertir en proyectos que muestren un potencial a largo plazo en lugar de confiar en aparentes beneficios inmediatos, porque nunca sabremos cuándo llegará el momento de la corrección donde posiblemente estaremos perdiendo nuestro capital. Cuando compramos activos con valoraciones muy bajas, en el corto plazo podemos sufrir una siguiente bajada porque nada impide que pueda seguir bajando, pero si presenta un fundamento sólido, entonces eventualmente tendremos retornos positivos de esa inversión.

La mentalidad del inversor debe estar clara, no conseguirás precios buenos cuando el sentimiento es positivo en el mercado, cuando el sentimiento es negativo de manera generalizada, entonces ahí habrá precios más asequibles.

En nuestra vida cotidiana, usualmente nos atrae aquello que es más barato con la idea preconcebida que tenemos sobre el precio de ese producto o servicio, por eso los precios baratos atraen y los precios que consideramos caros ahuyentan al comprador. En el Mercado de Valores, curiosamente sucede lo contrario, cuando existe una bajada sustancial en las cotizaciones dejamos de confiar en la rentabilidad de esos instrumentos, sin embargo, ante una subida prolongada, existe un sesgo de confirmación que nos induce a creer que ese activo seguirá subiendo.

En tiempos de cotizaciones de activos con un descenso sostenido, luego de resignarnos ante el evidente escenario bajista, la planificación que nos hacemos como inversores suele estar enfocada en ese momento donde intentamos calcular con precisión milimétrica cuando el mercado tocará fondo para inyectar nuestro capital y  alcanzar los mayores retornos.

La clave suele ser ¿Qué comprar? por encima de ¿Cuándo comprar?