¿Qué es la inversión pasiva?

La inversión pasiva se refiere a una estrategia de inversión en la que el inversor busca replicar el rendimiento de un índice de referencia o del mercado en general, en lugar de intentar superarlo. Esta estrategia se basa en la creencia de que los mercados son eficientes y que es difícil para los inversores superar consistentemente el rendimiento del mercado a largo plazo.

En la inversión pasiva, el inversor invierte en fondos indexados o ETFs (fondos cotizados en bolsa) que replican el rendimiento de un índice de referencia, como el S&P 500 o el NASDAQ. Estos fondos compran y mantienen las mismas acciones que componen el índice de referencia, en las mismas proporciones, sin tratar de seleccionar activos individuales.

Al invertir en fondos indexados, el inversor obtiene la diversificación de una amplia gama de acciones y sectores del mercado, reduciendo el riesgo de invertir en acciones individuales. Además, los fondos indexados suelen tener bajas comisiones y gastos, lo que los hace atractivos para los inversores que buscan mantener bajos costos.

La inversión pasiva es una estrategia popular entre los inversores que prefieren una aproximación de "comprar y mantener" a largo plazo, y que buscan un enfoque más predecible y menos volátil para invertir en el mercado.