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¿Qué es la inflación subyacente?

La inflación subyacente es una medida de la inflación que excluye los precios volátiles de los bienes y servicios sensibles a los precios. Estos bienes y servicios incluyen alimentos y energía, ya que sus precios tienden a fluctuar con mayor frecuencia y amplitud que los de otros bienes y servicios. 

La idea detrás de la medición de la inflación subyacente es proporcionar una visión más precisa de la tendencia subyacente de los precios de una economía.

Hay varios indicadores utilizados para medir la inflación subyacente, pero el más utilizado es el índice de precios al consumidor subyacente (IPC subyacente). Este índice mide el cambio en los precios de los bienes y servicios que se consumen en una economía, excluyendo los precios volátiles de los bienes sensibles a los precios. El IPC subyacente se calcula utilizando una técnica estadística conocida como desestacionalización, que elimina la influencia de lo factores estacionales en los precios de los bienes y servicios.

La inflación subyacente es importante porque ayuda a los economistas y a los responsables de la política monetaria a entender la tendencia de los precios en una economía. Si la inflación subyacente es elevada, puede indicar que hay una presión creciente en los precios, lo que puede requerir una respuesta para frenar la inflación. Por otro lado, si la inflación subyacente es baja, puede indicar que hay poco impulso en los precios, lo que pudiese requerir una respuesta de estímulo a la economía.

Ejemplos de elementos contemplados dentro de la inflación subyacente

Los precios de los siguientes elementos tienden a cambiar con menor frecuencia y amplitud que los de bienes sensibles al estar menos influenciados por los factores cíclicos de la economía, proporcionando una visión más precisa de la tendencia de los precios.

  • Servicios: la educación, la atención médica, el transporte y la vivienda.
  • Bienes duraderos: los electrodomésticos y los vehículos.
  • Productos intermedios: materias primas y componentes. 
  • Servicios profesionales: consultoría, contabilidad y abogacía.

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